Orlando Gonzalez Esteva: Todos sus libros


  • Casa De Todos

    Casa De Todos

    "Este no es un libro de haikus, aunque uno se encuentra en ella. Serlo.Es quería en el mejor de una manifestación de ese deseo: un libro de poemas cortos. Pero el haiku fue su punto de partida y en torno a él, o lo que él lo encontró accesible, gravita ", dijo Orlando González Esteva. "Sin poesía haiku como una forma sino como poética, como en el caso de este tipo de escritura, ya diferencia de lo que ocurre con las formas poéticas occidentales, supone casi una forma de vida. Que insiste en que no la fatiga un haiku estrofa: madura de una forma de ser (...).

  • Los Ojos De Adan

    Los Ojos De Adan

    Los seres humanos, animales y plantas; las estrellas y los objetos más simples; la literatura y el folclore; el peso de la historia y la ligereza de un pueblo; un aire de elegía y uno de celebración; el demonio unidad analógica y reflexivo; observar la curiosa y común; verso y prosa; el erotismo y la fe absoluta en el poder renovador de la imaginación en su poder para borrar los sentidos y ofrecer una versión más completa de todos se unen en este libro, donde Orlando González Esteva invita marca del mundo, ya que debe estrenarse todos los días en el primer hombre asombro ansiosos.

  • ¿que Edad Cumple La Luz Esta Mañana?

    ¿que Edad Cumple La Luz Esta Mañana?

    Octavio Paz dijo que los textos de Orlando González Esteva son "evidencia de que el idioma español todavía sabe cómo bailar y volar", destacando "su inventiva, su frescura, su desparpajo y rigor". Yo tenía razón. En estos versos se respira, por encima de todo, un espíritu lúdico e inquisidor. El resultado es una voz única en la literatura latinoamericana, una voz que se deja jugar salvaje y los placeres de la pérdida.

  • Las Voces De Los Muertos

    Las Voces De Los Muertos

    POESÍA Siltolá colección, Nº 31 (Poesía)

  • Animal Que Escribe: El Arca De Jose Marti

    Animal Que Escribe: El Arca De Jose Marti

    la escritura de los animales es una invitación a redescubrir José Martí (1853-1895) y liberar la imaginación de su carácter visionario y sensibilidad extrema. No es el Martí oficial, pero un poco menos de inusual y sin precedentes, el poeta capaz de preocuparse por el destino de una mosca, admirar la delicadeza del palo que mata a una luciérnaga, pero le salva la luz, distinguir el ganado más adecuados para la maternidad del más voluptuosa, alabado sea el encaje bordados cangrejos en la arena mojada, identificar el Quijote en un insecto, manchado una ostra con las alas y de abordar un tema serio con un toque de humor: Orlando Glez. Esteva juega en serio y nos recuerda cómo la poesía se lee escritura.